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Las normas de la sesión de Generación de Ideas – Neuronilla

La creatividad no está reñida con las normas. Muy al contrario, explicitar bien las reglas a las que nos vamos a atener antes de ponernos a generar ideas , facilitará paradójicamente la libertad y la singularidad de la producción.

Las normas de la sesión de Generación de Ideas

La persona dinamizadora expondrá o recordará esas normas.

  • Para grupos experimentados con los que ya hemos hecho otras sesiones de generación de ideas, también es importante hacerlo a modo de recordatorio de 2 ó 3 minutos.
  • Para grupos sin experiencia en ello, o con experiencia en generar ideas pero que no tienen bien incorporados en su práctica estos conceptos, será importante que dediquemos un tiempo amplio para que las bases del trabajo creativo queden claras. Será positivo en este caso haber realizado una formación previa en Creatividad e Innovación. Según la experiencia de Neuronilla basta con una sesión de sensibilización de día completo o incluso medio día.

Las normas de la sesión de Generación de Ideas

Lo primero es diferenciar las fases de que consta el proceso:

  • Generación de ideas (fase de aire): es el momento de producir ideas, el espacio para la imaginación, la fantasía, donde se da permiso al error, a lo descabellado. Durante esta parte se suspende el juicio.
  • Evaluación (fase de agua): evaluamos aquellas ideas que hemos generado, valoramos sus riesgos y potencialidades, descartamos las que no nos sirven (al menos de momento), las reorganizamos en torno a “conceptos” o familias semánticas, priorizamos. Aquí sí que entra el juicio lógico.
  • Desarrollo (fase de tierra): materializamos aquello que hemos ideado, es el proceso de realización de lo que hemos imaginado, de construir un producto (tangible o no). Este proceso suele ser largo.

Por supuesto, en el acto creativo en general, se suelen dar todos esos elementos de forma difícil de diseccionar, en espiral, con idas y venidas de uno a otro y, frecuentemente con mezclas entre ellos. No obstante, si trabajamos en una sesión de generación de ideas en equipo, cabe resaltar la importancia que tiene separar conscientemente (al menos en los momentos que decidamos), cuándo estamos generando ideas de cuándo las estamos evaluando. De no ser así, no permitimos que se dé la desinhibición suficiente, el “vuelo” necesario para establecer conexiones, analogías, poco usuales que nos permitan una idea luminosa.

Las normas de la sesión de Generación de Ideas

Con esta aclaración hecha pasamos a realizar las indicaciones básicas para la fase de generación de ideas:

  • Se suspende el juicio, durante la generación de ideas está terminantemente prohibida la crítica. No se mezcla con la evaluación, la opinión, la argumentación ni el razonamiento lógico (para ello ya habrá tiempo en la fase de evaluación). Evitaremos valorar las ideas ajenas (descalificaciones de ideas con comentarios como “eso no es posible”, “eso ya lo intentamos el año pasado y no funcionó”, “eso no es creativo porque conozco otra organización que hace algo parecido”, “eso es muy caro”, “eso nos llevaría mucho tiempo” o simplemente risitas burlonas o gestos faciales de desaprobación). También evitaremos la auto-crítica (“no voy a decir esto porque es una tontería”). Lo que sí está permitido es combinar o mejorar ideas expresadas por un compañero (por ejemplo en vez de decir “esa idea no vale porque resultaría muy caro” podemos generar otra idea inspirada en la anterior que abarate costes “en la idea esa podemos utilizar este otro material que abarataría los costes”).
  • Se busca la cantidad, aportamos todas las ideas imaginables, aunque en el resultado final busquemos no sólo la novedad sino también la calidad, es decir, que la idea sea valiosa, en esta fase resultará ayudador centrarnos sólo en producir el mayor número de ideas posibles, de ahí nos vendrá la variedad y novedad de las ideas, y de ahí la calidad.
  • Se busca la estimulación recíproca, casi todas las buenas ideas provienen de habernos inspirado con ideas, quizá descabelladas, de otros compañeros (ideas “puente”).
  • Las ideas son de todo el equipo, dado que suelen ser producidas por la estimulación recíproca, sería injusto considerar como “propietario” al miembro que ha expresado una idea valiosa que ha sido inspirada en una quizá larga cadena de ideas “puente” sugeridas por otros miembros del equipo. El equipo entero ha de ser “dueño” de las ideas surgidas en el equipo con independencia de si las ideas de mayor acogida las ha expresado un miembro u otro. Debemos reforzar positivamente a todo el equipo por su trabajo y no sólo a quienes verbalizaron las ideas más exitosas. De esta forma obtendremos resultados mucho más fructíferos pues estaremos fomentando la cooperación y la expresión de ideas en lugar de la competición y la lucha por sobresalir.
  • Las intervenciones han ser breves y espontáneas, explicar la idea en pocas palabras para no detener el flujo de generación. En casos excepcionales nos podemos extender un poco más en aquellas ideas que necesitan una cierta explicación o aclarar su principal matiz de valor.
  • Se anotarán absolutamente todas las ideas.

Tras estas aclaraciones, podremos explicitar las funciones de la persona dinamizadora y de la anotadora, hacer alguna actividad de desinhibición y ponernos a generar ideas.

Puedes ver más información sobre cómo dinamizar una sesión de generación de ideas en equipos (este artículo se corresponde con el paso 7).

  • Autor: David Díez (director de Neuronilla).
  • Fecha de publicación en Neuronilla: 09 / 07 / 2012

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